sábado, 28 de enero de 2017

Macri miente.


Alcanzado por la Resolución 1695/2013 que en su artículo 6° establece que “la actualización anual (de la Declaración Jurada Patrimonial Integral Pública) deberá presentarse hasta el día 30 de mayo del año siguiente al período que se informa”, el presidente Macri hizo su presentación en la Dirección General de Recursos Humanos cinco días antes de la expiración del plazo, el 26 de mayo (2016).

Todavía se hablaba de la insólita Plaza de Mayo vallada y cercada de policías armados, en lo que fue el único 25 de mayo de la historia argentina en que la Plaza fue vedada al ciudadano. Allí el presidente asistió al tradicional Tedeum en la Catedral Metropolitana sin entorno. Lo que estaba pasando era que agrupaciones cooperativistas habían decidido un acampe en la Plaza y que a través de las redes sociales se generaba una cita multitudinaria en protesta por los exorbitantes aumentos de tarifas de los servicios públicos, el alza continua de la inflación (con índices récord en 14 años), el reciente veto presidencial a la ley de emergencia laboral propulsada por la totalidad del arco opositor en conjunto con la totalidad de los sindicatos, el recorte presupuestario a las universidades, la apertura indiscriminada de importaciones, la quita de retenciones al sector agropecuario y el vigente escándalo de las cuentas off shore (de evasión impositiva) descubiertas al presidente y a numerosos miembros de su gabinete.

El diario El País (España), protector de las políticas conservadoras, tituló: “Mauricio Macri declara dinero en Bahamas mientras prepara una amnistía”. Huffington Post (Inglaterra) tituló: “El patrimonio de Macri: 7 millones de euros y tres cuentas en paraísos fiscales”. El Economista tituló: “Mauricio Macri admite que tiene una cuenta en un paraíso fiscal”. El propio Clarín, cogobierno actual, obvió el paraíso fiscal (la evasión impositiva) para titular: “Macri declaró un patrimonio de $110 millones, el doble que hace un año”.

La Plaza de Mayo vallada quedó (repentina y abrupta) en el pasado y los medios de comunicación concentrados (Clarín, La Nación y sus repetidoras) continúan su propia historia de presunta corrupción de empresarios durante la gestión del gobierno anterior (Lázaro Báez).

El artículo 1° de la ley 26.857 establece que “las declaraciones juradas patrimoniales integrales presentadas por las personas que se encuentran obligadas en virtud de la normativa de ética en el ejercicio de la función pública… son de carácter público, de libre accesibilidad y podrán ser consultadas por toda persona interesada en forma gratuita a través de Internet…”

El presidente no sólo consignó algo más de la duplicación de su fortuna en un año (108%) sino que además admitió la posesión de una cuenta a su nombre en el paraíso fiscal de Bahamas. Es más, dos días después informa públicamente sobre la disposición de un blanqueo de capitales (recepción abierta de dinero no declarado) y el envío de un paquete legislativo al Congreso para que éste “se aboque en tiempo récord” a tratarlo.

El blanqueo de capitales fue enviado al Congreso anudado como apéndice del proyecto de ley llamado "Reparación histórica para jubilados y pensionados" que incluye el pago de la deuda histórica del Estado con el sistema previsional, la creación de la pensión universal para el adulto mayor y, finalmente, el blanqueo de capitales.

En un atril de un centro cultural de San Cristóbal (CABA) Macri dijo que cobrará un impuesto "a los que más tienen y a los que han evadido" para hacer frente al pago de los juicios que muchos jubilados le ganaron al Estado.
"Con esta ley que estamos enviando al Congreso se busca reparar años de injusticia, nos encontramos con muchas situaciones de jubilados que ganaron juicios, y el Estado utilizó cualquier chicana para no pagarles".
La ingeniería PRO anudó el sistema previsional al blanqueo de capitales prometiendo que el pago de los reajustes de haberes se concretará a través de los ingresos que perciba el fisco por la presunta repatriación de dinero evadido y, además, los fondos de las ganancias de acciones que tiene la Ansés (en definitiva el único dinero utilizable si los capitales no regresan. De este modo, también se desfinancia y destruye la Ansés).

Macri, que sólo admitió un patrimonio de u$ 7 millones y (sólo) una de las 49 cuentas off shore que se le conocen, tuvo tiempo y semblante para plantear a micrófono abierto que
"…Hay miles de millones de dólares de argentinos que están en el exterior y se los llevaron porque no confiaron en el Estado… Necesitamos que nos acompañen y sean parte de esta nueva etapa que comienzan en la Argentina… Ya no tenemos un gobierno que viene a meter palos en la rueda y estafarlos, sino un gobierno que se comprometió a decir la verdad y a cuidar a cada uno de los argentinos".
A pesar de todo el montaje escénico, discursivo y legislativo la declaración jurada salió a la luz según cumplimiento de la ley 26.857.

Puede inducirse que si para presentar tamaña declaración – motivo de portadas de diarios del mundo – se montó semejante estrategia legislativo-comunicacional, para la confección de la propia declaración patrimonial hubo trabajado un numeroso equipo de asesores y técnicos con el unánime fin de “cerrar los números”.

Con todo, no obstante el diseño y la extrema asesoría legal, el punto 11 de la declaración, bajo el título de “observaciones”, reza:
“… El objetivo fue minimizar al máximo las diferencias detalladas en mi presentación del 17/03/2016; pues como para esta presentación se ha mantenido el aplicativo implementado el año anterior las mismas resultan inevitables…”
Buscando resquicios y forzando a extremos insostenibles el marco legal vigente, el equipo de asesores necesita “observar” la declaración jurada con tecnicismos incomprensibles al público, la sencilla estrategia que aplicara en su momento el actual intendente PRO de Lanús, Néstor Grindetti (testaferro de Macri figurante en los archivos de captura de Interpol) cuando la revelación de los Panamá Papers:
“Creo que es claro, no hay ningún tipo de cuestión controversial, se trata de una sociedad que no ha tenido ninguna actividad y por eso no ha sido registrada”.
Grindetti agregó entonces (abril 2016) que
 “…esto es para los entendidos, obviamente para los que no lo son hay que explicarlo un poquito más pero sencillamente es una empresa que no ha tenido actividad, que no ha nacido y por eso no ha sido declarada, esta es la más pura de las verdades y es lo que vamos a estar declarando si tenemos que hacer algún tipo de declaración formal”.
En efecto, esto es para los entendidos… es lo que vamos a estar declarando si tenemos que hacer algún tipo de declaración formal…



Ya se publicó (aquí y en gran cantidades de sitios, portales y periódicos) que la firma off shore ventilada y reconocida por Macri no sólo operó sino que hizo movimientos millonarios. Luego, conminado por la investigación de los Panamá Papers, se desdice (en menos de un mes). Incluso dejando al descubierto al propio Néstor Grindetti y a su Jefe de Gabinete, Marcos Peña.



Amparado por la geopolítica estadounidense que posó su poder sobre Latinoamérica para tomar los gobiernos mediante nuevos golpes de Estado (llamados “golpe blando”, “golpe parlamentario” o “neogolpismo”), este hombre que hizo gran parte de su fortuna evadiendo impuestos y en complicidad con los gobiernos de facto del Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983) y se instituye en franco representante de los intereses multinacionales, irrumpió en la función y administración pública y permanece en la presidencia argentina con el fin de desguazar y tomar el Estado y sembrar las condiciones de un esquema económico que muy difícilmente tenga reversión en un futuro desmesuradamente lejano.

Alejandro Carnero.
© PANAMACRI
Maira Gall